El músico estadounidense Quincy Jones, que produjo a grandes artistas como Michael Jackson y Frank Sinatra, falleció a los 91 años.
En el momento de su muerte estaba rodeado de su familia en su casa del barrio Bel Air, en Los Ángeles, informó su publicista, Arnold Robinson en un comunicado. No se especificó la causa.
«Con el corazón lleno pero roto, compartimos la noticia del fallecimiento de nuestro padre y hermano Quincy Jones», dijo su familia en el comunicado. «Y, aunque es una pérdida enorme para nuestra familia, celebramos la gran vida que vivió y sabemos que nunca habrá otro como él».
Desde Frank Sinatra hasta Michael Jackson, del jazz al hip-hop, Jones siguió el pulso siempre fluctuante del pop a lo largo de sus más de siete décadas de carrera.
Músico de jazz, compositor y creador de tendencias, Jones se convirtió en una estrella por derecho propio gracias a sus habilidades en el estudio y sus arreglos: su música fue la banda sonora del siglo XX, y sus partituras, bandas sonoras y éxitos siguen resonando hoy en día.
Pero su huella en el mundo de los negocios también fue indeleble: Jones se convirtió en el primer ejecutivo negro de una gran discográfica y desarrolló una infraestructura dentro de la industria para impulsar las carreras de artistas negros.
Su trayectoria
Quincy Delight Jones Junior nació en 1933 en el sur de Chicago. Descubrió su habilidad con el piano en un centro recreativo y se hizo amigo de Ray Charles durante su adolescencia.
Estudió brevemente en el Berklee College of Music de Massachusetts antes de unirse al director de orquesta Lionel Hampton en sus giras.
Finalmente se trasladó a Nueva York, donde adquirió notoriedad como arreglista para estrellas como Duke Ellington, Dinah Washington, Count Basie y, por supuesto, Ray Charles.
Fue la segunda trompeta en Heartbreak Hotel, de Elvis Presley, y formó equipo con Dizzy Gillespie durante varios años antes de mudarse a París en 1957, donde estudió con la legendaria compositora Nadia Boulanger.
Más tarde, llegó a Hollywood, donde compuso bandas sonoras para películas y programas de televisión.
Entre las figuras más condecoradas del mundo del espectáculo, Jones ganó prácticamente todos los premios más importantes, incluidos 28 Grammy.
En 1967, fue el primer compositor negro nominado en la categoría de canción original de los Oscar por la película Banning.
Creó un sello discográfico, fundó una revista de hip-hop y produjo el exitoso programa de televisión de los 90 The fresh prince of Bel-Air, en el que descubrió a Will Smith.
Compuso sus propios éxitos e hizo arreglos para docenas de estrellas de la industria, pero era sobre todo conocido por su trabajo con Michael Jackson, con quien produjo Thriller, Off the wall y Bad.
«Quincy lo ha hecho todo. Ha sido capaz de plasmar su genialidad a cualquier tipo de sonido», declaró el pianista de jazz Herbie Hancock a PBS en 2001.
Desde la música al cine, pasando por el activismo y el teatro, figuras del mundo del espectáculo rindieron homenaje al vasto legado de Jones tras conocerse la noticia de su muerte.
«La música no sería música sin ti», dijo el pionero del hip hop, LL Cool J, mientras que el dramaturgo y actor Jeremy O. Harris publicó que las «contribuciones de Jones a la cultura estadounidense fueron ilimitadas».
«Quincy, mi querido Quincy, tú también te has unido a las estrellas y esta mañana me pesa el corazón», publicó la trotamundos cantante y actriz francesa Line Renaud.
«Contigo, la vida se balanceaba, tenía jazz, eras alegría y ritmo, ¡eras un genio!»