Luego de un tiempo de negociaciones, Las Camelias reactivó la planta procesadora de aves de San Justo en un pequeño y emotivo acto. Participaron de la ceremonia los directivos de Las Camelias, autoridades locales, del Servicio de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa), representantes gremiales y los trabajadores del emprendimiento que hicieron un gran esfuerzo para sostener la fuente de empleo.
El frigorífico empleará a 170 personas en esta etapa, con una faena diaria de treinta y cinco mil aves, proyectándose llegar hasta 160.000 en los próximos 10 años, luego del plan de inversiones que Las Camelias piensa llevar adelante.
Cerca del mediodía se realizó un pequeño acto donde el presidente de Las Camelias, Raúl Marsó, luego de saludar junto con Graciela Marsó a cada uno de los trabajadores, resaltó la inversión realizada y el esfuerzo que hicieron los empleados para mantener el frigorífico en pie, destacando la voluntad de apostar al desarrollo del sector avícola en la región.
Marsó sostuvo que “son 170 personas de la zona que trabajan en relación de dependencia en este lugar y se suman cinco de nuestro equipo y espero que las ayuden para que sea más productiva y pueda salir adelante. Espero una amalgama entre ustedes y nosotros, necesitamos recrear valores de confianza entre todos. En esta etapa no trabajaremos al 100% pero verán que, ni bien podamos incorporar más granjas, esa producción se destinará a esta planta para consolidarla y hacer una gemela a la de San José desde el punto de vista de la calidad y de los productos que hacemos”.
“Sabemos que tenemos un futuro común, ese futuro pasa por hacer un triángulo positivo que son los buenos productos y clientes, la gente que sienta felicidad de trabajar y el cuidado del ambiente ecológico y social que nos rodea. Estamos para seguir desarrollando nuestra región, para seguir desarrollando nuestra provincia que tanto queremos y para que nuestro país siga creciendo. Y a pesar de los momentos difíciles que vivimos, seguimos apostando a pleno porque creemos que la avicultura tiene mucho para darle a la Argentina y no hay nada mejor que el trabajo digno, productivo. La gente de San Justo demostró que en los momentos difíciles no se doblega y ojalá que esa pelea en el futuro sea venturosa para todos. Nos va la vida en el trabajo, nos va la vida en lo que hacemos y estamos muy contentos de iniciar esta etapa sabiendo que nos van a acompañar”, afirmó el empresario.