El uso de las nuevas tecnologías se intensificó en el último año en el sector agropecuario, donde hace poco era impensado escuchar al hombre o la mujer de campo hablar de blockchain, internet de las cosas (IoT), token, inteligencia artificial o billeteras virtuales, como también resultaba imposible imaginar la posibilidad de pagar la compra de una camioneta con granos o adquirir una vaca en forma digital.
Los cambios fueron acompañados por las nuevas tecnologías para acceder a mejor información sobre la producción, transacciones más ágiles, mayor seguridad en los procesos productivos y comerciales, y para conseguir financiamiento a través de canales alternativos a los tradicionales.
Santiago González Venzano y Diego Steverlynck fundaron en 2016 la empresa S4 Agtech, que creó el primer índice en el mundo que permite a los productores argentinos de soja cubrirse de inundaciones y sequías y opera en el Mercado de Futuros de Rosario (Rofex).
Este año redoblaron la apuesta y pasaron «de ser agtech a isurtech» que es el acrónimo en inglés de la combinación de seguros y tecnología.
Venzano precisó a Télam que se trata de «una propuesta de gestión de riesgo» para lo cual desarrollaron «una cobertura climática basada en el índice S4, un seguro paramétrico que permite a productores cubrirse de eventuales sequías e inundaciones».
«Esto significó una evolución tecnológica muy fuerte. Estos seguros no se liquidan porque va el perito a mirar el campo, sino que se mide a partir de información satelital. Está basado en internet de las cosas, en sensores remotos», señaló el empresario.
Además, agregó que «con machine learning (aprendizaje automatizado) se pueden generar algoritmos, que producen a su vez estos índices de medición, y liquidar siniestros de manera automática y objetiva».
Una irrupción en el uso de tecnologías en el agro es ucrop.it, una aplicación que ofrece trazabilidad simple de los cultivos en blockchain.
El director ejecutivo de la compañía, Diego Hoter, precisó que «con el permiso del productor, las empresas reciben datos de la evolución del cultivo en la forma de reportes que cuentan su historia».