El calor extremo continúa en cuatro provincias del país

El Servicio Meteorológico Nacional (SMN) emitió una alerta de nivel amarillo para este miércoles debido a altas temperaturas en Mendoza, Neuquén, Chubut y parte de Río Negro

Según información oficial, las altas temperaturas pueden representar un peligro, especialmente para grupos de riesgo como niños, personas mayores de 65 años y aquellos con enfermedades crónicas.

En Mendoza, la alarma por calor extremo rige en la zona cordillerana de San Rafael y Malargüe, mientras que en Neuquén fue emitida para el este de Loncopué, el este de Piounches, el este de Ñorquín, el oeste de Añelo, el oeste de Pehuenches, el sur de Chos Malal y el sur de Minas.

Además, en Río Negro, la alerta del SMN fue publicada para la ciudad de San Carlos de Bariloche, donde la máxima podría alcanzar los 31 grados, y en la cordillera de Pilcaniyeu y Ñorquincó.

En tanto, en Chubut, la advertencia aplica para Futaleufú, Languiñeo y Tehuelches; la meseta de Cushamen; Gastre; Mártires, Telsen, Paso de Indios; Gaiman; meseta de Biema, de Florentino Ameghino, de Rawson y de Río Senguer.

Las alertas del SMN. Las alertas del SMN.

En medio de las temperaturas extremas, es importante recordar que tanto en las cercanías de la ciudad rionegrina de Bariloche como en el departamento chubutense de Futaleufú, desde hace días un feroz incendio está consumiendo las hectáreas de los parques nacionales Nahuel Huapi y Los Alerces, donde ya han sido afectadas alrededor de 600 y 8.205 hectáreas respectivamente.

Las recomendaciones para enfrentar una ola de calor

Ante estas elevadas temperaturas, el Ministerio de Salud aconseja aumentar el consumo de agua sin esperar a tener sed, evitar la exposición excesiva al sol, especialmente entre las 10 y las 16 horas, prestar atención especial a bebés, niños y personas mayores, y abstenerse de consumir bebidas con cafeína, alcohol o alto contenido de azúcar.

Asimismo, se recomienda evitar comidas copiosas, consumir verduras y frutas, reducir la actividad física, vestir ropa ligera de colores claros, utilizar sombrero y gafas de sol, permanecer en espacios bien ventilados o climatizados, y recordar que no existen tratamientos farmacológicos contra los golpes de calor, siendo los métodos tradicionales los únicos capaces de prevenirlos y contrarrestarlos.