El histórico volante siempre ha estado presente en los partidos clave y fue campeón olímpico, de América, Euroamericano y Mundial.
El rosarino Ángel Di María constituye un caso singular y por demás exitoso vistiendo la camiseta del seleccionado argentino, esa por la que fue cuestionado muchas veces sin tener en cuenta esta y otras circunstancias que lo hacen, después de Lionel Messi, en el máximo referente de la «Generación Lío».
Todo arrancó para «Fideo» en los Juegos Olímpicos de Beijing 2008, cuando anotó el único gol de la victoria por 1 a 0 sobre Nigeria que llevó a Argentina a obtener su segunda medalla de oro después de la conseguida en Atenas 2004.
La historia siguió nada menos que 13 años después, en la Copa América de 2021 en Brasil, cuando Argentina volvió a consagrarse campeón venciendo en la final al representativo local también por 1 a 0, con un gol de emboquillada de Di María, similar en su contextura al logrado en aquel partido decisivo en la capital china.
La tercera fue el 1 de junio pasado en la Finalissima entre el campeón europeo y el de América frente a Italia, en el mítico estadio inglés de Wembley.
El nacido un 14 de febrero de 1988 anotó el segundo tanto de un 3 a 0 sobre las postrimerías del primer tiempo, después de la apertura lograda por Lautaro Martínez y el cierre de Paulo Dybala.
Y el 18 de diciembre de 2022, también fue el autor del segundo gol albiceleste para el posterior empate 3-3 frente a los franceses y la victoria por 4-2 en la definición por tiros penales.
La cuenta la abrió su conciudadano y amigo Lionel Messi, de tiro penal, y la cerró, cuando parecía victoria en tiempo suplementario, nuevamente el capitán «Lío». Después empató Kylian Mbappé en su segundo penal de la noche y su tercer gol del día (hizo los tres de Francia).
Y como en las tres oportunidades anteriores, todas distintas entre sí, Argentina fue campeón. Y en esta oportunidad, por primera vez, fuera del continente americano, tras el primer título mundial en Argentina en 1978 y el siguiente en México 1986.
Di María fue campeón olímpico, de América, Euroamericano y Mundial. También supo ganar alguna Champions League con Real Madrid. Y el domingo fue su último partido con la camiseta argentina, al borde cumplir 35 años. Jugó en Manchester United y PSG. Ahora en Juventus.
Absolutamente, uno de los más grandes jugadores de la historia del fútbol argentino. Merecidísimamente.