Detenido por el asesinato de Calleja dijo tener Covid

Dijo no haber recibido el alta médica correspondiente.

El juez se vio obligado a suspender la actividad judicial.

En el marco de la causa por causa caratulada «Calleja, Gonzalo s/ Homicidio agravado en su perjuicio», comenzó este martes la audiencia de Garantías contra los detenidos por el caso: Alberto Enrique Osuna, cuyos abogados defensores serán César Jardín y Andrés Amarilla; Ezequiel David Morato quien estará representado por Eduardo Daniel Gerard y Marcelo Franco; Ivan Elías Garay, cuya defensora oficial será Fernanda Álvarez; y Ramiro Gabriel Colman representado por el abogado defensor Patricio Cozzi.
La audiencia de medidas de imposición fue presidida por el juez Ricardo Bonazzola en el Salón de Actos del STJ. En representación del Ministerio Público Fiscal estaba el fiscal Santiago Alfieri.
Sin embargo, a los pocos minutos de iniciada la audiencia, el magistrado se vio obligado a suspenderla debido a que uno de los detenidos, Osuna, dijo tener coronavirus y no haber recibido el alta médica correspondiente.
“Tuve Covid al momento de la detención, y me daban el alta el alta el viernes, pero como fue fin de semana, en el dispensario me la pasaron para el lunes 26”, comunicó el detenido. Informó además, que cumplió una condena de cuatro años. “Por razones sanitarias vamos a tener que sacar a la audiencia”, indicó el juez Bonazzola. A lo cual se informó desde la Sala: “Es una situación de la que no teníamos conocimiento, el detenido nunca la había manifestado y atento a esto vamos a disponer un cuarto intermedio para cumplir con el protocolo de desinfección”.

Sobre el caso
Gonzalo Calleja desapareció el miércoles 14 de julio. Había ido a barrio 1º de Julio a hacer una transacción por cambio de dólares. Allí apareció su auto. El último contacto fue a las 17 con sus allegados, a través de WhatsApp, pero su teléfono celular nunca fue encontrado.
El cuerpo fue hallado el jueves en un descampado de calle Montiel, a metros de Báez, a unos siete kilómetros de donde había desaparecido. Según trascendió, la principal pista de la investigación, es que Calleja, murió en el marco de una privación ilegítima de la libertad, en un lugar diferente al que fue hallado, a unos 8 kilómetros de donde se encontró el vehículo del contador, en cuya guantera había más de 9.500 dólares.
Por tal motivo, los pesquisas sospechan que la muerte, se dio en una situación vinculada a la compra y venta de dólares, actividad que desarrollaba el contador en ocasiones, además de ser empleado en una empresa constructora.