El edificio del Colegio del Uruguay Justo José de Urquiza debió ser desalojado tras recibirse un llamado que alertó sobre una amenaza de bomba y generó preocupación en la comunidad educativa.
Esto hizo que se diera intervención a la Policía de Entre Ríos que, de inmediato, instrumentó el protocolo para estos casos, razón por la que tanto estudiantes como docentes, trabajadores y autoridades del turno noche dejaron sus actividades y se retiraron de la emblemática casa de estudios.
Fue así que se colocaron las vallas de seguridad en torno al establecimiento, interrumpió el tránsito por las calles aledañas y dio aviso a la División Explosivos que, desde Gualeguaychú, se trasladó hasta Concepción del Uruguay para tomar intervención. A todo esto, el Cuerpo de Bomberos Voluntarios prestó apoyo logístico.
A la medianoche, personal especializado se encontraba en el interior del Colegio, ya que debía recorrer e inspeccionar todas las numerosas dependencias del Histórico, tanto en planta baja como en la alta.