▌El equipo de Koeman goleó 4-0 a Athletic Bilbao; el rosarino hizo el tercero y el cuarto y se afirmó como el más ganador en la historia del club.
Con un Lionel Messi inspirado, autor de dos goles, Barcelona ganó un título tras dos años al imponerse este sábado con un contundente 4 a 0 sobre el Athletic Bilbao en la final de la Copa del Rey, disputada en el Estadio de La Cartuja de Sevilla.
El rosarino fue la clara figura de su equipo, al haber sido determinante tanto con su buen juego como con su cuota goleadora. Al elenco catalán le costó quebrar a su rival, pero una vez que abrió el marcador, aparecieron los espacios y llegaron los goles que definieron al ganador de la edición 2020-21 del tradicional trofeo.
Antoine Griezmann, a los 15 minutos del segundo tiempo, marcó el primer gol en el estadio sevillano, mientras que tres minutos más tarde, Frenkie De Jong amplió la diferencia. Poco después, llegaron los goles de Messi: a los 23 minutos arrancó en velocidad, combinó con De Jong, se sacó un hombre de encima y definió con categoría, de zurda. Luego, a los 27, Jordi Alba desbordó por la izquierda, lanzó un centro atrás y la «Pulga», pegándole de zurda, de primera, colocó la pelota junto a un palo para rubricar la goleada. Messi llegó a los 31 goles en la temporada (los mismos que marcó en toda la campaña pasada) y suma ya 35 títulos con el club azulgrana: cuatro Liga de Campeones, tres Supercopas de Europa, tres Mundiales de Clubes, diez Ligas de España, ocho Supercopas de España y, con la de hoy, siete Copas del Rey (también fue la séptima para sus compañeros Gerard Piqué y Sergio Busquest).
Barcelona se consolidó como el máximo campeón del certamen: alzó la copa en 31 oportunidades. El Barça perseguía una coronación en una temporada en la que a nivel internacional fue eliminado en los octavos de final de la Champions League por el Paris Saint Germain, mientras que en la Liga de España está tercero con 65 puntos, detrás del Atlético de Madrid (67) y el Real Madrid (66), a ocho fechas del final.