Consignan que Iván fue “un guerrero”

El niño obtuvo el alta, viajó y ya está en Concepción del Uruguay.

Así lo indicaron sus familiares a LA CALLE.

Luego de haber recibido el alta médica, Iván Nievas Cabrera, el niño uruguayense de 9 años, que fuera intervenido a raíz de una afección en el corazón en el Instituto Cardiovascular Infantil de Colegiales (Capital Federal), emprendió ayer el viaje de regreso con sus padres y ya está en su hogar junto a sus seres queridos para continuar su recuperación.
De acuerdo a lo informado a LA CALLE, la operación practicada fue “compleja” debido la tetralogía de Fallot, efecto de nacimiento que afecta el flujo normal de sangre por el corazón y se produce cuando dicho órgano no se forma correctamente mientras crece y se desarrolla en el vientre materno durante el embarazo. Fue por este motivo que a los 5 meses fue operado y, en esta oportunidad, volvieron abrir su tórax para el cambio de válvula y la reconstrucción del anillo de la aorta. Precisamente su familia, puso de relieve el profesionalismo del cardiólogo Javier Cornelli como, también, el de la doctora Zayat y el de cada médico y enfermera que estuvo en la Terapia y en la Sala al cuidado de Iván. También se valoró el apoyo recibido de su abuela, hermana y del grupo familiar, amigos y personas que, a la distancia, pusieron sus oraciones de fe y esperanza. También se destacó la colaboración recibida de parte de la mutual Ospia y el acompañamiento de los trabajadores de Tres Arroyos, del Sindicato de la Industria de la Alimentación (STIA), de los scouts y amiguitos del niño. “Iván demostró las ganas de vivir día a día. “Fue un guerrero valiente y demostró que se puede vivir con un corazón diferente”, afirmaron sus familiares.
Cabe recordar que la tetralogía de Fallot se puede tratar mediante la cirugía poco después del nacimiento del bebé. Durante la intervención, los médicos ensanchan o reemplazan la válvula pulmonar y agrandan la salida a la arteria pulmonar. También colocan un parche sobre la comunicación interventricular para cerrar el orificio entre las dos cavidades inferiores del corazón. Estas medidas mejoran el flujo de sangre a los pulmones y al resto del cuerpo. La mayoría de los bebés tiene vidas activas y saludables después de la operación.