“Conocía a varias personalidades, pero al entrar en detalle hubo cuestiones que me impactaron”

Al material lo financió el municipio puede ser reclamado por entidades.

El ex periodista de La Calle, brindó datos del texto.

Por Matías Dalmazzo

Muchas veces nos encontramos transitando diversas calles de la ciudad y nos llaman la atención sus nombres, qué motivó a la conducción municipal de turno para bautizar determinada arteria vial y cuáles son las futuras personalidades locales que pueden llegar a ser electas para trascender en la historia local con este honor.
Desde hace dos años existe un material bibliográfico, “Calles con Historias”, editado en la ciudad y que da cuenta de todos estos interrogantes. Este texto también brinda datos poco conocidos para las nuevas generaciones y dignos de recordar para los más entrados en años. Con la intención de darle difusión a esta valiosa edición, este matutino empezará a publicar esta semana pequeños fragmentos del libro con historias de las principales arterias viales. Pero antes y con la intención de conocer un poco más el contenido del texto, dialogamos con Jorge Héctor Bonvín, ex periodista de este medio (entre 1966 y 1973) y antiguo jefe de redacción del diario La Calle de Curuzú Cuatiá (que era también propiedad de los Sáenz Valiente).

-¿Cómo surgió la idea de editar el libro con los nombres de las calles de la ciudad?
-Este trabajo es producto de una casualidad, dado que a partir de empezar a trabajar como secretario del Concejo Deliberante en la gestión de Martín Oliva, tenía a cargo las ordenanzas. Por una inquietud personal comencé a reunir las que se nombraban calles. En una oportunidad me solicitaron información para alumnos del colegio, preparé unas fotocopias, alguien se la mostró a Lauritto, se entusiasmó y me propuso que hiciéramos un libro. Las ordenanzas consultadas empezaban con la número 1 en 1906, es así que había calles que habían sido nombradas anteriormente que no aparecen en el libro, solo son mencionadas en el prólogo siguiendo la Historia de Concepción del Uruguay del Profesor Urquiza Almandoz.

¿Cómo podrías describir el contenido de esta edición?
En realidad es una mezcla, por un lado la recopilación de las ordenanzas y por el otro el texto que yo tuve que agregarle, incluyendo el prólogo donde se hace referencia a distintos aspectos que tiene el nombramiento de calles.
Hasta más o menos 1970 las ordenanzas nombraban una calle pero no aportaban datos sobre la personalidad a que se refería. Allí está mi aporte, realizando una explicaban breve de quien se trata. En algunos casos fue fácil conseguir material por tratarse de personas muy conocidas a nivel nacional incluso, ejemplo Juan Perón, pero en otros fue un poco más complicado.

¿Fue complicado hurgar en texto u ordenanzas con lenguaje antiguo? ¿Pudiste evidenciar diferencias idiomáticas entre las ordenanzas más antiguas y las de ahora?
No fue tan difícil, ya que la fui haciendo de a poco en casi dos años. Lo que se destaca de esta búsqueda es que el nombramiento de calles tiene fuerte relación con el pensamiento de la época.

¿Cómo se explica eso?
Lo puedo resumir en dos conceptos, por un lado es notable la poca consideración hacia la mujer. Recién en 1950 se tiene una calle en la ciudad con nombre de mujer, que fue Eva Perón. Este nombre desaparece, por supuesto, en 1955 con la caída del peronismo y es así que tiene que esperarse hasta 1967 cuando se le da el nombre de la poetisa Celia Torrá a una calle de la ciudad.
No se puede usar como argumento que no había mujeres destacada, la extraordinaria mujer que fue Teresa Ratto había muerto en 1906 y recién en 1975 se le dio su nombre a la calle Washington que es la que pasaba por el lugar donde vivía. Después surgieron muchos nombres de mujeres en las calles de la ciudad, pero como las del centro ya estaban ocupadas, están todas en los barrios periféricos.
El otro aspecto que tiene que ver en el nombramiento de calles fue la cuestión política. La vieja calle “Salta”, por ejemplo, cambia de nombre en cada gobierno peronista por “17 de Octubre”. Así tuvo varios cambios hasta que en 1970 se le da el nombre de “Jhon Kennedy”, ya que había pegado muy fuerte en todo el mundo su asesinato. Esto es hasta que el 28 de marzo de 1984, el Concejo Deliberante decidió darle el nombre de Combatientes de Malvinas, que es el que hoy tiene.

¿Cuáles son las personalidades más destacadas del ámbito nacional o provincial que tienen una calle con su nombre en la ciudad?
Como nombres de calles hay de todo. Presidentes como Urquiza, Rivadavia, Mitre, Sarmiento, Yrigoyen, Perón y Frondizi para ponerlos en orden; personalidades internacionales como Alberto Sabín o la madre Teresa de Calcula; nacionales como René Favaloro, Lisandro de la Torre y Esteban Etcheverría; instituciones locales como La Fraternidad, el Despertar del Obrero o el Círculo Católico de Obreros; Parques Nacionales como El Palmar y Nahuel Huapi; artistas locales, algunos todavía vivos como los Hermanos Cuesta y los Hermanos Crosignani. Por ejemplo, Alberto Apeseche, recientemente fallecido, ya tiene un nombre de calle. Se debería aquí hacer mención al barrio San Isidro, al que por decreto durante el gobierno de Alí Argachá se le dio a sus calles nombres de flores.

¿Qué personalidades locales destacadas tienen una calle con su nombre?
Hay muchas. Como ya señalé anteriormente, en los últimos años muchas mujeres importantes en el quehacer local tuvieron su reconocimiento. En las calles de Concepción del Uruguay hay intendentes, rectores del Colegio Nacional, políticos, artistas, poetas, trabajadores sociales en el caso de Pocho Lepratti e incluso hay referencia a la Virgen María con el nombre de María Auxiliadora y Virgen de Itatí.

¿Existe algún nombre de alguna calle de la ciudad que hayas descubierto durante la edición del mismo y que te llame la atención? ¿Cuál/es? Y ¿Por qué?
Sí. La que me llamó la atención fue una calle de la ciudad que se llamara Virrey Vertiz, que fue instituido por ordenanza de 1916. Investigando resulta que este Virrey fue quien dio la orden a don Tomás de Rocamora para que viniera a estas tierras a fundar ciudades. Fue la primera vez que se le sacó el nombre de Vicente H. Montero, para dar espacio al del Virrey. Posteriormente el nombre de Montero figurará, pero con cambios varios con Juan Perón. Fueron tantos los cambios que en la esquina noroeste de Perón y Alberdi, todavía sobrevive una placa con su nombre.

¿Crees que estamos siendo contemporáneos a alguna personalidad local, que indiscutiblemente va a tener una calle con su nombre para ser recordado por futuras generaciones?
Seguramente que sí. Recientemente se ha puesto el nombre de una calle a la profesora Enriqueta Morera, que falleciera hace poco y creo que la ciudad está debiendo un homenaje a dos historiadores que fueron Miembros de la Academia Nacional de la Historia y que realizaron un importante aporte a la historia de Entre Ríos: los profesores Oscar Urquiza Almandoz y Manuel Macchi.

¿Existe alguna institución de la ciudad que por decirlo de alguna manera haya aportado más personalidades para darle nombre a nuestras calles?
Indudablemente el Colegio Nacional aportó nombre de rectores y alumnos destacados, incluso tengo constancia de una carta de redacción a este diario, que publicara el señor Víctor Tallafer en 1985. Allí hizo referencia a que en 1889, con motivo de cumplir el Colegio 50 años, destacados ex alumnos del colegio (Julio Argentino Roca, Victorino de la Plaza, Benigno Tejeiro Martinez, José Zubiaur, Martín Reibel, entre otros) le solicitan al Intendente Municipal de ese entonces, Wenceslao Gadea, que de designe a calles de la ciudad con los nombres de ex rectores Erausquin, Jordana, Larroque, Clak y Ereño. Es sin dudas la institución que aportó gran número de nombres importantes, no solo para las calles de nuestra ciudad sino para el país al que le dio tres presidentes.

¿Cómo podrías describir la experiencia de haber encarado este proyecto editorial?
Este libro fue para mí una gran enseñanza, conocía en general a varias personalidades pero al entrar en detalle hubo cuestiones que me impactaron. Para dar un ejemplo, José Benjamín Zubiaur ha sido rescatado como integrante del primer Comité Olímpico Internacional, pero su labor más importante la desarrolló como educador y su tesis para recibir el doctorado de abogado, “En defensa del niño”, es todavía consultado por su actualidad o el caso de Teresa Ratto, una de las primeras médicas que murió, lamentablemente, prematuramente fue una personalidad defensora del feminismo.