Los restos encontrados el 30 de octubre a la vera de la Ruta 15, en Rosario del Tala, fueron identificados como pertenecientes a Martín Sebastián Palacio, el remisero desaparecido desde el 7 de octubre que había trasladado al doble femicida Pablo Laurta. El hallazgo ocurrió cerca del cruce hacia Sauce Sur, en una zona rural del centro de Entre Ríos, luego de un llamado anónimo que aportó la ubicación precisa.
Los forenses confirmaron que el cráneo y un brazo encontrados en ese operativo correspondían a Palacio, después de semanas de estudios. La investigación sostiene que el remisero se reunió con Laurta en la terminal de Concordia, donde inició un viaje que, según los indicios, terminó cuando el hombre acusado de dos femicidios lo asesinó y ocultó parte del cuerpo en inmediaciones de Estación Yeruá, cerca del último registro de su teléfono.
Los equipos de búsqueda avanzaron días después por caminos secundarios y localizaron un cuerpo desmembrado que sería del remisero. Ese procedimiento se realizó el lunes 13 de octubre y el cadáver fue trasladado a Concordia para su identificación. Más tarde, el hallazgo del cráneo y una de sus extremidades en Rosario del Tala completó la reconstrucción del recorrido criminal.
El viaje de Palacio comenzó cuando aceptó trasladar a Laurta desde la terminal de ómnibus de Concordia hacia Santa Fe. El pasajero le ofreció 1,5 millones de pesos y quedó registrado en cámaras de seguridad al subir al Toyota Corolla. El auto avanzó hacia el sur provincial, llegó a la ruta 22 rumbo a Federal, regresó a la autovía 14, luego ingresó por caminos de ripio hacia General Campos y finalmente salió a la ruta 18 con dirección a Córdoba.
La familia del remisero hizo la denuncia en Concordia después de que Palacio dejara de responder mensajes y llamados. Su hermana viajó a la ciudad para formalizarla y desde ese momento la investigación se centró en cámaras, trazas de geolocalización y los últimos contactos. Ese análisis permitió establecer que el chofer llegó a la terminal y se encontró con Laurta antes de perderse su rastro.
Los investigadores confirmaron que Laurta ya había contratado los servicios de Palacio en otras oportunidades. Tras los femicidios de Luna Giardina y Mariel Zamudio, y la desaparición del hijo de una de las víctimas, la policía entrerriana detuvo al acusado en un hotel de Gualeguaychú. El nene estaba con él y en la habitación aparecieron pertenencias del remisero, lo que reforzó la hipótesis de que también lo había asesinado. Con la identificación de los restos, la causa avanza hacia una etapa clave.
