El juez federal Sergio Ramos cerró una causa contra Silvio Robles, secretario del juez de la Corte Suprema Horacio Rosatti, que se había iniciado por los supuestos chats filtrados con Marcelo D’Alessandro, ministro de Seguridad y Justicia porteño con pedido de licencia.
En su duro fallo, el juez consideró que debía archivarse el expediente porque las comunicaciones fueron obtenidos a través de espionaje ilegal.
La causa se inició con una denuncia que presentó el abogado Gastón Marano contra Robles y D’Alessandro por las comunicaciones que presuntamente tuvieron en torno al fallo de la Corte Suprema sobre la coparticipación de la Ciudad de Buenos Aires que se filtraron a la prensa.
“No pueden ser admitidas bajo ningún concepto como parte de un juicio respetuoso del debido proceso, pruebas o testimonios que hayan sido obtenidos, como a esta altura puede observarse, mediante maniobras organizadas basadas en actividades de inteligencia ilegal”, sostuvo Ramos. Los chats fueron obtenidos hackeando el celular de D’Alessandro.
“El juez debe velar porque no haya injerencias arbitrarias o ilegales en la vida privada de las personas sin razón que lo justifique”, planteó y añadió que de ninguna manera el Estado ni otros actores deben inmiscuirse en la “vida privada de forma ilegal”.
En la iniciativa de juicio político que impulsa el Gobierno contra la Corte Suprema, una de las acusaciones está basada en los chats entre Robles y D’Alessandro.
