Comenzó en Gales el juicio por la muerte del futbolista argentino Emiliano Sala. El proceso tiene por objetivo determinar la responsabilidad de un hombre que está acusado de haber sido quién organizó el vuelo que se estrelló en el Canal de la Mancha el 21 de enero de 2019 y en el que trágicamente perdieron la vida el deportista y el piloto David Ibbotson, que eran los dos únicos ocupantes de la nave. David Henderson, de 67 años, admitió que organizó el vuelo sin tener permiso ni autorización de las autoridades británicas. En tanto que afirmó ser inocente del cargo por poner en peligro la seguridad de una aeronave. Estas acusaciones han sido llevadas adelante por la Autoridad de Aviación Civil (CAA, según sus siglas en inglés).
La acusación lo culpaba de poner en peligro la aeronave y a las personas que viajaban en ella, así como de operar un avión comercial sin permiso, cargos de los que solo admitió el segundo, en el juicio que comenzó ayer en Cardiff.
El avión, que viajaba en enero de 2019 desde Nantes hasta Cardiff, estaba ocupado por Sala, que acababa de fichar por el Cardiff, y por David Ibbotson, el piloto, y se estrelló en el Canal de la Mancha. El cuerpo del delantero argentino fue recuperado junto al fuselaje del avión, mientras que el del piloto nunca se encontró.
Pese a que el Cardiff, club que había fichado a Sala, intentó que el argentino volara a Gales en un avión comercial, los intermediarios de la operación, Willie McKay y su hijo Mark, contrataron a Henderson para que organizara un vuelo privado.