La arquitectura es emblema de ciudades y naciones, y la casa de Urquiza, ocupada desde hace muchísimos años por Correo Argentino , seguramente lo es, por su historia, su calidad y estilo arquitectónico , el volumen y estructura de su construcción, su ubicación y dimensiones, que lo convierten en un verdadero Palacio. No existe un edificio igual o parecido en la Costa del Uruguay.
Detengámonos un momento en la época en que se construyó el edificio, 1870, en la que Uruguay era prácticamente un villorrio, siendo por lo tanto junto al Colegio y la Basílica únicos con esas características y que los Uruguayenses tenemos el privilegio de poseerlos. Sin embargo, la construcción se parece a la de un barco abandonado en el medio del mar sin vida, oscurecido y sin destino.
Muchos políticos han sido muy sensibles a la idea de mejorar y conservar el patrimonio histórico, tal el caso de François Mitterrand, que transformo a la ciudad de París en la década de 1980, con la puesta en valor de edificios antiguos, este estadista comprendió muy bien la idea de que detrás de la obra se encontraban los intereses superiores de Francia y así se concibió y se llevó a la práctica.
En este aspecto adquiere especial relevancia la palabra forma, siendo que la falta de forma denuncia la falta de proyecto. Urquiza, a mediados del Siglo XIX tuvo esa noción fundamental, apoyándose en el destacado arquitecto Domingo Centenaro de origen Italiano, quien lo diseño con estilo italianizante, como fácilmente se puede advertir, comenzando la obra en 1870, la que se vio interrumpida por su fallecimiento, concluyéndose los trabajos en 1874. El destino que tenia la casa era albergar a su familia, sabiendo la enorme importancia que Urquiza le prestaba a su núcleo familiar.
Es necesario e indispensable su puesta en valor, para lo cual el Centro viene trabajando desde hace 5 años, arribándose a una propuesta clara que modificara el casco urbano y traerá beneficios indudables al turismo y a la economía y que transformara al edificio en un hito histórico uruguayense . Ello le da sentido a recientes declaraciones de esta ciudad como capital histórica de Entre Ríos y Cuna de la Organización Nacional.
El proyecto finalmente fue presentado el 22 de julio del 2022, en un acto multitudinario realizado en el Club Social al que asistió numeroso público. Ha recibido el aval de numerosas instituciones públicas y privadas, vinculadas al quehacer cultural, educativo y económico, quien se ha presentado públicamente en favor de esta idea transformadora para la ciudad, por lo que la sociedad civil se ha manifestado sin fisuras ni grietas en apoyo al proyecto, en razón de que se ha comprendido de que es una obra que beneficia nuestra casa común, que es la ciudad. Precisamente este tipo de propuesta tiende puentes entre el estado y la sociedad civil y los distintos integrantes de esta, es netamente superadora de cualquier concepción política partidista, colocando al interés general en la cúspide de la pirámide de los intereses comunitarios.
También sabemos que es una obra compleja que exige la intervención del estado y la de especialistas con el auxilio de la tecnología, pero nada de ello es imposible cuando existe la firme decisión de llevarla a cabo.
Finalizo estas palabras con el deseo del Centro de que este sea el año del inicio de esta propuesta transformadora, cuyo contenido está en la numerosa documentación que se ha reunido en estos años de trabajo, con la participación de historiadores, arquitectos, museólogos, abogados, docentes, personas vinculadas al quehacer turístico y representantes del poder político, la que se encuentra a disposición de los interesados.
Para el Centro Cultural JJ Urquiza por Hector Fidel Rodriguez