Calles con HISTORIA

Ordenanza 2897. Promulgada el 29 de Agosto de 1984. Calle: Ricardo Balbin
Que es intención de este Concejo Deliberante reivindicar con medidas efectivas, para la historia de nuestro país, la trayectoria de los grandes hombres que se han destacado en el ejercicio del poder político elegidos por sus pueblos, como una medida tendiente a reafirmar los principios democráticos que queremos afianzar para la prosperidad del sistema de vida.-
Que existen en nuestra ciudad calles simplemente numeradas sin nombre que las identifiquen; y Considerando:
Que han existido en nuestro medio ese arquetipo de hombres que merece por parte del Honorable Concejo Deliberante su reconocimiento, haciendo abstracción de políticas partidarias ya que no pertenecen ellos a un solo partido político, reivindicamos pues la trayectoria de quienes fueran ciudadanos ejemplares, a saber:
Art.2º: Asígnase el nombre de Bvard. Dr. Ricardo Balbín, al tramo comprendido entre la intersección de los Bvards. Irigoyen y Díaz Vélez, hasta la ruta nacional 14 nueva «ex provincial Nº 24» Camino Viejo a San Justo.-
Ricado Balbin. Hay hombres que alcanzan brillo y notoriedad porque se han desempeñado bien en las más altas magistraturas.- Menos lo logran por su especialización en las ciencias, técnicas o cultura.- Solamente los grandes resplandecen en el ejercicio del accionar político que exacerba las pasiones y enfrenta las opiniones, y solamente algunos elegidos concitan la buena voluntad del conjunto después de luchar contra todos los excesos.-
Entre estos hombres de excepción, quizás casi único, se enmarca el Dr. Ricardo Balbín; luchador infatigable de la democracia, defensor permanente de los Derechos Humanos, de la libertad. En días de incomprensión y del desencuentro argentino sufrió cárcel y persecución. Casi adolescente enfrentó las minorías del privilegio que habían derribado al Gobierno del Dr. Hipólito Irigoyen. El fragor de la disputa quizás no le permitió ver antes que los principios de solución en la Argentina pasaban por la unidad nacional, pues reinaban las minorías por el desencuentro de las mayorías; cuando ubicó el problema, y haciendo abstracción de todas sus heridas y agravios yendo al encuentro de su adversa-rio a tender una mano amiga siendo retribuido con el mismo afecto y solidaridad. De esa forma selló arriba, la unidad nacional que poco a poco se extendió a las bases.- Aquel gesto «amigó al pueblo», como le gustaba decir. Comenzó de esa forma la cuenta regresiva de la dictadura.
No es exagerado decir que su muerte enlutó a todos los argentinos.