El Gobierno trabaja en un paquete de medidas tendientes a aflojar las tensiones cambiarias que permanecieron aún con las mayores restricciones a la compra de divisas. Fuentes del sector privado y de Gobierno confirmaron que una de las medidas en estudio tiene que ver con los derechos de exportación al campo, que podrían bajar de forma temporaria para impulsar a los productores a vender y generar mayor oferta de divisas entre octubre y diciembre. Actualmente, las retenciones a la oleaginosa se ubican en 33% y las de maíz, en 12%.
Lo que evalúan en el gabinete económico es que si se redujeran por un tiempo algunos puntos estos derechos, los productores venderían porque necesitan fondearse para la próxima campaña, precisó una fuente del sector. En el caso del maíz, los productores vendieron el 71% de la cosecha, mientras que en el caso de la soja, se comercializó el 62% hasta el momento. La tasa de interés, sostiene el ministro de Economía, Martín Guzmán, debe ser lo suficientemente atractiva para el ahorro, pero sin descuidar la producción.
En la industria precisaron que el gobierno espera duplicar las ventas de septiembre: llevarlas de 2 a 4 millones de toneladas, entre soja y maíz. Sostienen que si el gobierno le mejora el precio al productor por algunos meses, lograría que muchos vendan y aumentaría así la oferta de dólares.
Por un lado, porque pensarían que luego volverán a tener un precio más bajo. Y por otro, porque las autoridades vienen defendiendo el tipo de cambio oficial a rajatabla, a pesar de las expectativas de devaluación que existen en el mercado. Otra de las medidas llegaría desde el Banco Central por el lado de la política monetaria.