Señor director:
Con la vuelta a clases tras las últimas restricciones y con el avance de la vacunación de gran porción de los adultos uruguayenses, las puertas de los jardines y escuelas se están llenando de abuelos que ansiaban ir a buscar a sus nietos, un poco para dar una mano a sus hijos y un poco para disfrutar de los pequeños de la familia.
Lamentablemente este amor que tienen por sus nietos y la necesidad de ayudar a sus hijos, los lleva a cometer el error de ir a la puerta de los establecimientos educativos y hacer sociales. Para ellos todo es divertido y sin buscar molestar a nadie, alargan innecesariamente las entregas de niños en las puertas de las escuelas.
Esperemos que sea una cuestión de los primeros días y todo vuelva a la normalidad, ya que en los últimos días se tornó complicado ir a retirar niños a las escuelas donde se agolpan los abuelos amorosos con sus nietos, pero un tanto molestos para quienes necesitamos retirar al gurí lo antes posible y evitar el amontonamiento de personas.
Miguel Albornoz
