Días pasados nos dimos la oportunidad de replicar un encuentro entre las dos orillas de nuestra provincia. Paraná y Concepción del Uruguay reunidas institucional y políticamente para abordar cuestiones comunes, afines, concurrentes y más que nada aquellas en relación al tiempo por venir. Esto sirvió para intercambiar experiencias y socializar un modo de gestionar para el tiempo que viene, que es presente. Está claro que vamos a necesitar a la comunidad más organizada que nunca, y a eso lo sabemos fundamentalmente los municipios, que somos los que estamos cara a cara con la gente de manera permanente.
La búsqueda de diálogo, encuentro y consensos es tan necesaria hoy día como nunca antes lo fue. Luego de una derrota provincial del Justicialismo, la posibilidad de encontrarse en términos políticos resulta clave y de importancia entre las dos ciudades de referencia en la provincia, me refiero a la capital administrativa y a la capital histórica, ambas Justicialistas y ganadoras en la última elección del año pasado.
Escenario nacional
Contextualizando, en términos generales, el problema que tenemos hoy por hoy los argentinos es un problema de intereses. De los que pujan por vivir a costa del sufrimiento del pueblo y de los que tratan de imponer otras formas de vivir y progresar de manera colectiva. Por eso vemos dos modelos de país diferenciados, donde existe un modelo participativo que nos representa a quienes nos definimos como Justicialistas -con anhelos comunitarios de justicia social, de independencia y de soberanía-, y un modelo excluyente que representa a los círculos de influencia y presión con fines especulativos.
Lamentablemente hoy día la Argentina que soñamos tiene su alma derrotada y frustrada, pero aún a pesar de ello está latente en el subsuelo de la patria cierta esperanza. Nuestro país está viviendo aspectos decisivos y de las soluciones que se alcancen dependerá el futuro que podrá ser bueno o malo. La decisión de la resolución en esta circunstancia está dada fundamentalmente en el factor tiempo.
Encuentro
Ante ese escenario nacional, los Justicialistas entrerrianos necesitamos de un sano encuentro generacional y político representado en una unidad en la diversidad. Abrazarnos con quienes ganaron e ir a abrazar a quienes no lo hicieron en sus localidades. La construcción de procesos como estos implica por sobre todas las cosas que la unidad en la diversidad debe estar dada por la vocación de ser mejores y vencer nuestras debilidades. Y es esto lo que por ejemplo empezamos a construir ahora entre las dos orillas. Un abrazo entre compañeros y compañeras, en la gestión y también en lo partidario.
Lo nuestro es la gente
En este tiempo de incertidumbre, de repensar al Peronismo, los Justicialistas entrerrianos tenemos que entender que serlo no significa “alardearlo o vociferarlo”. Se trata más que nada de estar formados como cuadros políticos con una doctrina “aggiornada” al Siglo XXI sobre la base de los mismos principios rectores que nos dieron origen e identidad, que enamore desde los hechos más que desde las palabras, pero que no repita los errores del pasado reciente. Necesitamos dos cosas fundamentales, volver a representar esperanza en el pueblo y un peronismo movilizado.
Aunque todos los caminos sean duros y difíciles, a mis compañeros y compañeras les digo que pensemos que en cada uno de nosotros está el futuro -que es presente-, creamos en nosotros y tengámonos confianza para ser capaces de poder realizar todos nuestros sueños y también nuestras utopías. Recordemos siempre que lo nuestro es la gente y la búsqueda de su felicidad. Seamos inteligentes, fortalezcamos el diálogo y el encuentro a dos orillas -y más-. Démosle valor.
(*) Abogado. Concejal 2023-2027. Vicepresidente 1° HCD. Presidente del Bloque Concejales PJ 2023-2027. Apoderado del Consejo Departamental PJ Uruguay. Secretario de Gobierno 2019-2023. Concejal 2015-2019. Presidente del Bloque Concejales PJ 2017-2019. Presidente Comisión Hacienda y Presupuesto 2015-2019. Decano del Colegio Mayor Universitario de Santa Fe 2003-2004.-
