Topolansky recibió a Marianela Marclay para analizar la actualidad y la integración regional

La exvicepresidenta de Uruguay, Lucía Topolansky, mantuvo este viernes un encuentro con Marianela Marclay, secretaria de Desarrollo Social de Concepción del Uruguay y recientemente electa diputada nacional. La reunión se realizó en la chacra de Topolansky, en Montevideo, y contó también con la presencia del concejal Juan Martín Garay.

Durante la conversación, las dirigentes intercambiaron miradas sobre la realidad argentina. Se repasó la compleja coyuntura económica del país, marcada por la alta inflación, el deterioro de los salarios, el avance de la pobreza y la falta de empleo, especialmente entre los sectores más vulnerables. También se mencionaron la incertidumbre respecto del rumbo económico, la necesidad de políticas de crecimiento y la problemática de la inseguridad.



Con una extensa trayectoria en la vida pública —fue diputada, senadora, presidenta de la Asamblea General y del Senado, además de vicepresidenta de Uruguay—, Topolansky compartió su visión sobre la relación social y cultural entre “las dos orillas” y remarcó la importancia del compromiso comunitario.

“La sociedad debe sentirse parte para poder salir adelante. Hay que ver al vecino como aliado y no como competidor; el voluntariado es un ganar-ganar”, expresó. También evocó el legado de su esposo, José “Pepe” Mujica, al referirse a “la revolución de las cosas simples”.

Preocupación por el futuro de la ciencia en Argentina
Topolansky manifestó su inquietud por el deterioro de la investigación científica en el país. “Me aflige ver cómo están destruyendo un sistema que siempre estuvo a la vanguardia. Argentina es el único país de Sudamérica con cuatro premios Nobel”, subrayó.

En ese marco, resaltó el valor de instituciones como el INTA y su vínculo con organismos de Uruguay (INIA) y Brasil (EMBRAPA), destacando la necesidad de fortalecer la articulación regional para promover el desarrollo.

Antes de finalizar, la exvicepresidenta dejó una reflexión: “Pobre es quien no tiene comunidad”, remarcando la importancia de reconstruir los lazos de solidaridad y cooperación más allá de las fronteras.