Comenzar el seguimiento médico del embarazo de forma temprana puede marcar una diferencia significativa en la salud materno-infantil. Desde el Ministerio de Salud se enfatizó en la importancia del control prenatal oportuno que permite detectar a tiempo posibles complicaciones.
«Durante las primeras semanas se forman los principales órganos del bebé. Por eso, es fundamental identificar a tiempo posibles situaciones como hipertensión o diabetes materna, infecciones tratables, riesgos de parto prematuro, bajo peso al nacer, malformaciones, así como también evaluar la necesidad de vacunas y suplementación con ácido fólico o hierro», explicó el director general de Condiciones Neonatales Esenciales (CONE) y Regionalización Perinatal, Paulo Capotosti.
En esa línea, el profesional agregó: «El control prenatal es una instancia para educar e informar sobre hábitos saludables, alimentación adecuada, señales de alarma, y también para brindar contención emocional a las gestantes, muchas veces atravesadas por temores, dudas o situaciones de vulnerabilidad. A su vez, permite prepararse para el parto y la maternidad».
Desde la cartera sanitaria se recomienda que la primera consulta prenatal se realice idealmente antes de la semana 10 de gestación, y no más allá de la semana 12. La frecuencia de los controles puede variar según cada caso, pero en general se aconseja una consulta mensual hasta la semana 28, cada dos a tres semanas entre la semana 28 y la 36, y semanalmente a partir de entonces hasta el nacimiento.
En Entre Ríos, tanto los centros de atención primaria como los hospitales garantizan el acceso gratuito, equitativo y sin barreras al control prenatal, en el marco de un sistema de salud comprometido con el bienestar de las madres y sus bebés.
¿Qué incluye el control prenatal?
Primer trimestre (hasta la semana 13):
– Grupo sanguíneo y factor Rh
– Prueba de Coombs indirecta (si Rh negativo)
– Hemograma completo
– Glucemia en ayunas
– TSH (Hormona Estimulante de la Tiroides)
– Serología para sífilis, toxoplasmosis, VIH, Chagas, hepatitis B
– Urocultivo
– Examen de orina
– PAP (si no se hizo en el último año)
Segundo trimestre (14 a 28 semanas):
– Curva de tolerancia oral a la glucosa (24- 28 semanas)
– Repetir serología: Sífilis, VIH, toxoplasmosis
– Test Coombs (si Rh negativo)
– Urocultivo
– Hemograma y orina
Tercer trimestre (32 semanas en adelante)
– Repetir: Sífilis, VIH, Hepatitis B
– Cultivo de Streptococcus grupo B (35- 37 semanas)
– Coombs indirecto (si Rh negativo)
– Hemograma y orina
– Prequirúrgico (Electrocardiograma y coagulograma)
Diagnóstico por Imágenes
– Primera ecografía: antes de la semana 13; con la confirmación del embarazo, edad gestacional, se puede determinar si un embarazo es único o múltiple, ubicación de la placenta, viabilidad.
– Segunda ecografía (morfológica): entre la semana 20 y 24 para la evaluación anatómica del bebé.
– Tercera ecografía: se efectúa entre la semana 32 y 36 para realizar el control de crecimiento, líquido amniótico y placenta.
Si en el transcurso del embarazo se detecta algún factor de alto riesgo tanto los laboratorios como ecografías serán con mayor frecuencia y de mayor complejidad.