Juan Pablo Karnatz, secretario de la Federación de Asociaciones Agropecuarias Santiagueñas (FAAS) y vocal de la mesa ejecutiva de Confederaciones Rurales Argentinas (CRA), señaló que en Catamarca había alrededor de 300 focos que se han controlado bastante bien. Según explicó, el insecto traspasó las fronteras y ya se registró en Paraguay y Bolivia. “Esto es un riesgo muy importante porque es una plaga regional, puede llegar a desplazarse a 100 km por día si el viento ayuda”, precisó.

El foco se inició en la localidad de Matará, Santiago del Estero. Foto: (La Nación)