En la tarde del miércoles, el gobernador Rogelio Frigerio entregó a la Policía de Entre Ríos los primeros 50 vehículos provenientes del funcionariado provincial, que fueron reasignados para actividades de investigación. Durante la ceremonia, el mandatario destacó la importancia de este acto como un símbolo de austeridad, cumpliendo así con un compromiso de campaña y resaltando la necesidad de dar ejemplo desde el Gobierno.
De un total de 160 vehículos que deben ser reasignados, se logró recuperar hasta el momento 80 unidades. Frigerio expresó su preocupación por la desidia de la política, indicando que muchos de estos autos estaban abandonados, sin motor y batería, con vegetación creciendo en su interior.
Los vehículos entregados a la Policía, en su mayoría, tenían las chapas patentes tapadas u ocultas, y se destinaron principalmente a la División de Investigaciones y Drogas en los distintos departamentos.
El gobernador resaltó el compromiso de poner fin al uso personal de los autos oficiales por parte de funcionarios, marcando una diferencia con prácticas del pasado. Además, advirtió que aquellos que aún retengan vehículos del Estado tendrán algunos días más para devolverlos; de lo contrario, serán denunciados ante la Justicia.
Frigerio concluyó enfatizando que este día marca un punto de inflexión en la forma de hacer política en la provincia, subrayando la importancia de la austeridad como un símbolo significativo de cómo se manejará el Gobierno en los próximos cuatro años. Los vehículos recuperados restantes serán asignados a Municipios y Juntas de Gobierno que los hayan solicitado.
