Se trata de una realidad grave que necesita ser atendida.
La contraparte de la histórica y exitosa temporada turística en Entre Ríos es la alarmante cantidad de accidentes con víctimas fatales en las rutas de la provincia. Enero registró una cifra superior a los peores antecedentes de los últimos años, con 25 muertes provocadas por siniestros viales.
Según el relevamiento de los accidentes fatales informados en estas páginas desde el comienzo del año, en 31 días fallecieron 25 personas en las rutas de Entre Ríos o en los hospitales donde fueron internadas por las lesiones sufridas. Uno de los decesos está bajo investigación porque podría tratarse de una autodeterminación de la víctima. En ese caso el número cerraría en 24. Más allá de un caso más o menos, la realidad es grave.
Al respecto, el coordinador del Observatorio Provincial de Seguridad Vial, Pablo Peil, aclaró: “No debemos hacer un ranking con la cantidad de víctimas fatales, porque estamos hablando de personas fallecidas y familias destruidas. Pero debemos reconocer que es el enero más trágico de los últimos años, con cifras muy similares a enero de 2019 (20 víctimas fatales) y de 2017 (21 víctimas fatales). Otro dato importante de este enero fue que seis de cada 10 víctimas fatales fueron usuarios vulnerables: peatones, ciclistas y motociclistas”.
El comisario a cargo de Operaciones Viales de la Policía de Entre Ríos, Luis Báez, coincidió que fue el enero con más accidentes fatales de los últimos años. “No es común la cantidad”, alertó. En diálogo con UNO, precisó que las infracciones más reiteradas en las rutas de la provincia son exceso de velocidad, adelantamiento en doble línea amarilla, no uso de luces bajas y problemas de licencia o documentación. Aseguró que prácticamente todos los hechos fatales fueron provocados por “negligencia” al volante. Y enumeró como factores: no se respetan las señales de tránsito o ni siquiera se advierten, los conductores van distraídos y tampoco siguen las velocidades mínimas y máximas. El funcionario policial llamó la atención por la falta de descanso de los responsables del manejo. “Viajan por vacaciones hasta lugares alejados, generalmente hacen un tránsito de paso por la provincia, no descansan lo suficiente y terminan durmiéndose”, aseveró Báez. También se destacan los casos de alcoholemia positiva detectados en los controles de los puestos camineros. “Se constatan semanalmente entre 30 y 50 alcoholemias positivas. Es un índice bastante alto”, consideró el comisario de Operaciones Viales, Luis Báez. Consultado si el estado de las rutas es otra de las causas de la fatalidad, el comisario observó que hay “ciertos tramos de rutas en muy mal estado, por ejemplo, la Ruta Provincial N°6 entre Tala y Villaguay”. Allí, según Báez, en cercanías de la rotonda de acceso a Rosario del Tala, se produjo el único accidente fatal de enero determinado por la situación de la calzada.
Por su parte, Peil confirmó en declaraciones a Uno Entre Ríos que la temporada turística incrementó la circulación de vehículos en las rutas de Entre Ríos y por esto creció el riesgo de siniestros viales. “Si bien aún no podemos presumir una causalidad directa, podríamos mencionar como común denominador el exceso de velocidad y la distracción de los conductores (mayormente asociada al uso del celular). Y en numerosos hechos los conductores han arrojado resultados positivos en los test de alcoholemia”, ratificó. El coordinador del Observatorio Vial evaluó: “Debemos profundizar los trabajos de control y prevención que venimos realizando como Estado, e insistir en la responsabilidad y la predisposición de cada entrerriano para mejorar la seguridad vial”. Desde la Policía, Báez sentenció: “hay una mala cultura de manejo que tenemos que erradicar”, y puso el foco en la necesidad de concientización en escuelas primarias, secundarias y municipios.