Hojas Sueltas… Datos personales

Ariel Vercelli

Los problemas para Google Inc. parecen no tener fin: sanciones millonarias en la Unión Europea por violación a la privacidad; en Rusia por desinformar a la población y en India por abuso de posición dominante. Incluso, hace unas semanas atrás en Estados Unidos el Partido Republicano demandó a la corporación por censurar, por razones ideológicas, correos electrónicos a través del filtro spam de Gmail. ¿Algo más? Y sí… el lunes 14 de noviembre Google Inc. tuvo que pagar en Estados Unidos unos 391,5 millones de dólares “por prácticas abusivas contras los consumidores”. Específicamente, por haber recopilado y usado ilegalmente los datos de la ubicación de sus usuarios, incluso cuando estos habían desactivado explícitamente estas funciones de sus teléfonos móviles. Un dato importante: la información recolectada ilegalmente por la corporación se compartía también con terceras empresas y anunciantes de publicidad y propaganda. Las investigaciones que se iniciaron en 2018 por una nota periodística de Associated Press (AP) se centraron en aquello que la fiscal General del Estado de Oregon, Ellen Rosenblum calificó como “tácticas engañosas” que Google venía utilizando desde el año 2014. La magnitud del caso deja muy claro que los datos de ubicación resultan claves para el negocio publicitario y propagandístico de corporaciones o mega compañías como Google, Facebook,, Amazon o Apple. La sanción señala que “los datos de ubicación están entre la información más sensible y valiosa ya que se puede conocer la identidad y las rutinas de una persona”, y esa información puede utilizarse para “inferir detalles personales”. Google usó esos datos para crear perfiles de usuario detallados y orientar anuncios a los consumidores en nombre de sus clientes publicitarios”.
Si bien se trata del mayor acuerdo entre privacidad y consumo en Estados Unidos, las apariencias no deberían engañarnos: el monto a pagar puede ser apenas un vuelto. El negocio publicitario anual del gigante tecnológico, gracias a estas prácticas ilegales, supera los 200.000 millones de dólares.
A su vez es importante resaltar que Google no va a transformar sus prácticas. Oficialmente manifestó que había “resuelto estos problemas” hace varios años y que, “de ser necesario, tal vez podría hacer ajustes al sistema operativo Android”… ¡pero solo para el año que viene! En lo inmediato, Google Inc., sus socios comerciales y las agencias de inteligencia de Estados Unidos continuarán haciendo negocios con los datos personales de sus usuarios de todo el mundo.