Bautismo
Lucas Segovia fue ungido con los óleos bautismales. Fue durante una ceremonia oficiada en la parroquia San Roque.
Becas Creación 2022
El Fondo Nacional de las Artes (FNA) convoca a creadores de toda la Argentina y de las distintas disciplinas a participar en la edición 2022 de las Becas Creación, cuya inscripción se realizará hasta el 14 de julio. Con el objetivo de contribuir a la reactivación del sector artístico-cultural tras la emergencia sanitara, y contemplando la irrupción de nuevas tecnologías, el FNA contemplará las siguientes disciplinas: Artesanías, Teatro y Artes Circenses, Danza, Artes Visuales, Diseño, Arquitectura, Audiovisuales, Letras, Música y Patrimonio. Los postulantes pueden inscribirse en tres categorías: compra de materiales e insumos, desarrollo del proyecto y finalización de obra. Esta última es la novedad saliente de la versión 2022 de las Becas Creación, ya que permite a los postulantes utilizarla para instancias de posproducción, edición (libros, discos), estrenos, muestras e inauguraciones, así como proyectos de gira y participación en ferias o festivales. En esta categoría pueden presentarse además ganadores de la edición 2021 que se encuentren en la fase final, siempre que hayan presentado el informe final correspondiente de sus proyectos que pueden ser, en todos los casos, individuales o grupales. Los elegidos en la categoría de compra de materiales e insumos recibirán 100 mil pesos ya fueran proyectos individuales o colectivos; para su desarrollo el estímulo asciende a 120 mil pesos (individuales) y 180 mil (colectivos) y para la nueva categoría de finalización de obra se destinarán 160 mil y 200 mil pesos, respectivamente.
Santoral
Los católicos recuerdan hoy a San Juan Gualberto. Nació en Florencia, de familia muy rica. Fue heredero de una gran fortuna y su padre deseó que ocupara altos puestos en el gobierno. Un Viernes Santo fue por un camino rodeado de varios militares amigos suyos y, de pronto, se encontró en un callejón al asesino de su hermano. El enemigo no tuvo adonde huir y Juan dispuso matarlo allí mismo. El asesino se arrodilló, puso sus brazos en cruz y le dijo: «Juan, hoy es Viernes Santo. Por Cristo, que murió por nosotros en la cruz, perdóname la vida». Al ver Gualberto aquellos brazos en cruz, se acordó de Cristo crucificado. Se bajó de su caballo. Abrazó a su enemigo y le dijo: «Por amor a Cristo, te perdono». Siguió su camino y, al llegar a la próxima iglesia, se arrodilló ante la imagen de Cristo crucificado y le pareció que Jesús inclinaba la cabeza y le decía: «Gracias Juan». Desde aquel día, su vida cambió por completo. En premio de su buena acción, Jesús le concedió la vocación y Juan dejó sus uniformes militares y sus armas y se fue al convento de los monjes benedictinos de su ciudad a pedir que lo admitieran como religioso. En aquellos tiempos, el peor defecto que había en la Iglesia era la Simonía, es decir, algunos compraban los altos cargos. En el convento de Florencia, donde estaba Juan, se murió el superior. Y uno de los monjes fue con el obispo y, con dinero, hizo que lo nombraran superior a él. También el obispo había comprado su cargo. Gualberto no pudo soportar esa indignidad y se retiró de aquel convento con otros monjes y, antes de salir de la ciudad, declaró públicamente en la plaza que el superior del convento y el obispo merecían ser destituidos porque habían cometido el pecado de simonía. Más tarde, logró que los destituyeran. Se fue a un sitio muy apartado y silencioso, llamado Valleumbroso y allá fundó un monasterio de mojes benedictinos, quienes se propusieron cumplir exactamente todo lo que San Benito había recomendado a sus monjes. El monasterio llegó a ser muy famoso y le llegaron vocaciones de todas partes. Después de haber logrado que muchas personas abandonaran sus vicios y se convirtieran, que muchos sacerdotes empezaran a llevar una vida santa y al gozar del enorme aprecio del Papa y de numerosos obispos, murió el 12 de julio de 1073, dejando muchos monasterios de religiosos que trataron de imitarlo en sus virtudes y llegaron a gran santidad.