Todos los 14 de febrero se conmemora el Día Mundial de las Cardiopatías Congénitas y es una buena oportunidad para visibilizar la problemática. El Programa provincial de Cardiopatías Congénitas destaca la importancia que tiene el diagnóstico oportuno y la detección precoz en pacientes con malformaciones del corazón.
El responsable del Programa y médico del Hospital Materno Infantil San Roque de Paraná, Enrique Olmedo manifestó: “En general las cardiopatías se presentan en forma esporádica y sin ningún antecedente por lo que, se recomienda el estudio de rutina en las embarazadas como es la ecocardiografía a partir de la semana 20 para detectar la patología a tiempo”.
Y agregó: “Otras dos formas para saber si existen estas enfermedades son: una vez que el bebé nace el pediatra lo puede observar en un examen general y, en niños, niñas o adolescentes, son detectadas por exámenes de rutinas, por ejemplo un electrocardiograma”.
En general este tipo de alteraciones tienen una incidencia del 1 por ciento aproximadamente en la población general. De ese 1 por ciento, menos de la mitad de los recién nacidos necesita un tipo de intervención quirúrgica, hemodinámica o medicamentosa antes del primer año de vida. Cuando se trata de anomalías graves se estabiliza al paciente, y se lo deriva a un establecimiento de mayor complejidad que forme parte de la Red Nacional, ya que las cirugías en estos casos específicos son complejas.
