La justicia ordenó devolver el cannabis que cultivaban

Fueron absueltos y luego pidieron recuperar el producto.

A un padre y su hija les habían incautado 2,4 kilos de flores y aceite.

Aunque existen antecedentes de decisiones judiciales similares en distintos puntos del país, por primera vez en Entre Ríos la Justicia ordena devolver la marihuana secuestrada en un allanamiento en Paraná a usuarios de cannabis con fines medicinales. Un hombre con distintos padecimientos de salud y su hija habían sido imputados porque tenían casi dos kilos y medio del vegetal, que cultivaban en su casa de Paraná. Ninguno tenía el registro que los habilitara a tener o cultivar, pero luego iniciaron el trámite y obtuvieron uno, mientras se espera el segundo. Por acuerdo entre la Fiscalía y la defensa, ambos fueron sobreseídos y ahora se dispuso la devolución de los frascos y bolsas con cannabis que habían sido incautados. El caso comenzó el 27 de abril pasado, a partir de una denuncia por problemas vecinales que derivó en el allanamiento a la vivienda. Los policías buscaban armas y cartuchería, pero encontraron 146 frascos y 23 pequeñas bolsas con marihuana, algunos con cogollos, otros con aceite de cannabis, que pesaron en total 2,4 kilos. El hombre de 64 años y su hija de 24 quedaron implicados en una causa que, inicialmente, se caratuló por comercio de drogas, aunque en seguida esa sospecha iba a caerse.
Al momento de declarar, la joven contó que su padre tiene una serie de dolencias estomacales, artritis y artrosis, y que a ella le cuesta conciliar el sueño. Por esto, hacía un par de años comenzaron a probar con consumir aceite y ungüento de cannabis para paliar estos problemas de salud. Durante 2020comenzaron a cultivar en su domicilio plantas de marihuana para el consumo personal.
Además, dijo que luego del allanamiento inició el trámite de inscripción, para ella y su padre, ante el REPROCANN (Registro del Programa de Cannabis), para el cual solicitó los certificados médicos correspondientes. Hasta ese momento había salido la autorización para la joven mientras se aguardaba que saliera la de su padre, que continuaba en trámite. Según se informó, aún no se lo dieron porque el REPROCANN tuvo un colapso en el sistema porque llegó a casi 40.000 inscriptos, lo cual causó una gran demora burocrática. Por otra parte, padre e hija se encuentran, al igual que cientos de personas en Paraná y la provincia, a la espera de que se implementé el Registro Provincial para poder inscribirse como personas autorizadas al cultivo con fines medicinales. La Ley provincial sancionada en mayo, aún no fue reglamentada por el gobierno.
Asimismo, presentaron copia de la historia clínica y recetas del padre, donde se acreditaba las dolencias que sufre, y aportaron el registro de la hija como “Persona Autorizada al Cultivo Controlado con Fines Medicinales y/o Terapéuticos”. El fiscal del caso, Ignacio Aramberry, consideró que el consumo de la sustancia -cultivo y elaboración de por medio-, se encontraban justificados, en tanto implicaba anteponer la salud personal ante la salud pública (que es lo que busca proteger la Ley nacional de drogas), y explicó que esta tensión que se encuentra normativamente resuelta en favor de la salud personal a través de la Ley 27.350 y el decreto que la reglamenta.