Sr. Director:
Hola , espero que estén bien. Después de tanto calor, vienen las lluvias y con ellas los mosquitos.
Justamente son los ellos los que transmiten el dengue, por eso es importante saber de la enfermedad y cómo podemos hacer para prevenirla.
En un año marcado por la pandemia del COVID-19 el dengue continúa. Es una infección vírica que se transmite por la picadura de un mosquito hembra del género Aedes que se encuentra infectado con el virus. El Aedes aegypti -que se caracteriza por presentar franjas negras y blancas en sus patas y abdomen- y el Aedes albopictus son los mosquitos transmisores del dengue, pero el primero constituye la principal fuente de transmisión, no solo del dengue, sino también de la fiebre chikungunya, la fiebre amarilla y la infección por el virus de Zika.
Como este insecto tiene hábitos domiciliarios, la transmisión suele ser predominantemente doméstica. Además, las picaduras suelen darse durante el día, ya que esta especie tiene un período de alimentación más activo antes y después del amanecer y del atardecer. El contagio solo se produce por la picadura de los mosquitos infectados, nunca de una persona a otra, ni a través de objetos o de la leche materna. Pero, aunque es poco frecuente, las mujeres embarazadas también pueden transmitir la enfermedad al bebe en su útero.
Al no existir una vacuna contra el dengue, la única forma de controlar la enfermedad es prevenirla, evitando la propagación de criaderos de mosquitos y la picadura del mismo.
¿Cómo prevenir los criaderos de mosquitos?
● Eliminar todos los recipientes en desuso que puedan acumular agua ( latas, botellas, neumáticos, etc).
● Dar vuelta los objetos que se encuentran en el exterior y pueden acumular agua cuando llueve (baldes, palanganas, tambores).
● Cambiar el agua y limpiar los bebederos de animales, colectores de desagües de aire acondicionado o lluvia que se encuentren dentro y fuera de la casa, cada 3 días. Además, es necesario frotar las paredes de los recipientes con una esponja a fin de desprender los huevos de mosquito que puedan estar adheridos.
● Rellenar los floreros y porta macetas con arena húmeda.
● Mantener los patios limpios y ordenados y los jardines desmalezados.
● Limpiar las canaletas y desagües de lluvia de los techos.
● Tapar los tanques y recipientes que se usan para recolectar agua.
La fumigación no es suficiente para eliminar el mosquito ya que los insecticidas eliminan a los mosquitos adultos pero no a los huevos y larvas. Su implementación debe ser evaluada por las autoridades sanitarias ya que solo se recomienda en momentos de emergencia, y siempre debe ser acompañada por la eliminación de todos los recipientes que acumulan agua en las casas y espacios públicos, de lo contrario, volverán a crecer mosquitos adultos, a los pocos días.
Dra. Valeria El Haj, Directora Médica Nacional de Ospedyc