El tenista argentino Tomás Etcheverry debutó con un triunfo en el Masters 1000 de Shanghái. Por otro lado, su compatriota Sebastián Báez cayó ante el francésGaël Monfils (46°).
Etcheverry superó por 7-6 (5), 3-6 y 7-5, en un partido que duró 3 horas y 42 minutos, al neerlandés Botic Van de Zandschulp (67°).
El platense tuvo un gran primer set, donde se mostró levemente superior a su rival, que de igual forma realizaba un gran partido.
Fue recién en el segundo cuando Van de Zandschulp tuvo sus primeras oportunidades de quiebre, pero Etcheverry logró detenerlas. Aun así, el argentino cometió un error que le dio el set a su rival por 6-3.
El platense se pudo llevar el punto de partido en el 5-6 del tercer set, en un enfrentamiento donde su rival no se dio por vencido y lo arrinconó en más de una ocasión. De esta manera, sumó su segunda victoria ante el neerlandés, donde en julio del 2023 lo superó, también en tres sets, en los octavos de final de Gstaad.
El próximo rival de Etcheverry podría ser el número uno del mundo Jannik Sinner o el japonés Taro Daniel(93°).
Por otra parte, Báez cayó por 6-3, 4-6 y 6-4, en 2 horas y 12 minutos, ante el francés Monfils y se despidió en su primer partido.
De esta forma, el tenista europeo sigue convirtiéndose en su verdugo, ya que se enfrentaron en tres oportunidades y el argentino no pudo llevarse el triunfo en ninguna de ellas. La última vez que se habían visto las caras fue en el Roland Garros 2023.
En el primer set, Báez no pudo aprovechar las oportunidades que tuvo y, en el octavo juego, Monfils logró quebrar para, posteriormente en el noveno juego, llevarse el set por 6-3.
Ya en el siguiente, el bonaerense salvó tres pelotas de ruptura en el primer juego y el francés hizo lo propio en el segundo. El europeo tuvo el break después de aprovechar su tercera pelota de ruptura en el tercer juego.
Aun así, Báez pudo reponerse e igualar el marcador para, posteriormente en el décimo juego, sentenciar el set y ganarlo por 6-4.
Si bien el argentino arrancó 2-0 abajo en el tercer set, pudo recuperarse y empatar el parcial. Fue recién en el noveno juego cuando Molfils se puso 15-40 y, aunque no pudo la primera vez, consiguió quebrar en la segunda.
De esta forma, el galo solo tuvo que ganar su servicio para quedarse con el partido y el pase a la próxima ronda, donde se enfrentará a su compatriota Ugo Humbert.