Por Juan Martín Garay (*)
Recordar cada 2 de abril el “Día del Veterano y de los Caídos en la Guerra de Malvinas”, es reconocer la valentía que tuvieron estas personas para luchar por la reconquista de nuestras Islas. Este orgullo que sentimos de los héroes que nos representaron en la heroica Gesta de Malvinas es eterno, enorme e inconmensurable; algo que nos obliga hoy más que nunca a que nuestra consigna sea la de “malvinizar”.
Como argentinos no debemos quedarnos simplemente con la mera conmemoración tradicional de una fecha, año a año, sino que es necesario hacernos el compromiso moral y patriótico de encarar todos juntos una tarea educativa y “malvinizadora”, para mantener vivos no sólo estos 40 años de historia sino todos los que vendrán por delante en el camino de la Patria.
Este homenaje que se merecen los compatriotas que participaron en la guerra de Malvinas, los que volvieron y los que quedaron custodiándolas –como así también sus familiares– debe servir para darles nuestro respeto y valoración; reconociendo la valentía de quienes fueron a defender nuestra soberanía, dándolo todo por todos nosotros, incluso hasta perder la vida.
Destacando el enorme coraje y todo lo que hicieron en Malvinas, por Malvinas, debemos resaltar y compartir la tarea que hacen hoy día los veteranos y sus familiares para movilizar y no olvidar, manteniendo viva la llama de la memoria; reclamando ser reconocidos y visualizados, nutriéndonos así del coraje y el valor necesario para no claudicar jamás en el reclamo permanente de lo que entendemos nos pertenece.
Ningún recuerdo, conmemoración o monumento, estará jamás a la altura del sacrificio, ni tendrá el tamaño de la grandeza de estos patriotas. Nuestro mejor homenaje es, y debe seguir siendo, continuar con empeño, sin pausa y con responsabilidad –por las vías legales y de la paz–en la misión de recuperar la soberanía sobre nuestras Islas Malvinas. En algún momento la racionalidad se deberá imponer sobre la fuerza y sobre la sangre antes derramada, para volver a tener bajo nuestro dominio lo que nos pertenece por derecho. No desistamos nunca del reclamo con la negociación y el diálogo. Siendo racionales y creyendo en eso, definitivamente, hay que bregar por alcanzar un punto de encuentro con el Reino Unido de Gran Bretaña y de una vez por todas recuperar la soberanía de nuestro País en éste, nuestro territorio.
Reclamemos, pero jamás olvidemos, nuestra consigna es y debe ser la de “malvinizar”, no olvidar, demandar permanentemente y nutrirnos del valor de quienes estuvieron en Malvinas, para jamás bajar los brazos. “Malvinizar” significa tener siempre presente que las Islas Malvinas fueron, son y serán eternamente argentinas. ¡Viva la Patria!
(*) Secretario de Gobierno de la Municipalidad de Concepción del Uruguay desde el 2019. Presidente de Bloque Concejales del PJ 2017-2019. Presidente Comisión Hacienda y Presupuesto 2015-2019. Decano del Colegio Mayor Universitario de Santa Fe 2003-2004.
