Dolores era joven cuando conoció al General Urquiza y se fue a vivir a la Residencia de San José estando embarazada de su primera hija en común, Lola. Allí criaron 11 hijos entre los años 1853 y 1870.
Ella era una mujer decidida, de carácter y empresaria. Conocía el manejo de las estancias y su actividad. En San José, era la encargada de supervisar distintas tareas como el control de maestros, institutrices, jardineros y cocineros; además de encargarse de los agasajos a los visitantes y de la recepción de huéspedes.
Al producirse la muerte del General Urquiza, se trasladó a Buenos Aires junto con su familia, desde donde dirigió los inmuebles y variados negocios de la sucesión en curso. Una de las acciones más interesante a destacar es que crea la Colonia Caseros en 1874.
El 8 de noviembre de 1896, fallece en su casa de calle Lavalle al 1500 en la ciudad de Buenos Aires; rodeada de hijos y nietos. Sus restos se encomiendan al cementerio de la Recoleta para luego ser trasladados al cementerio de Olivos en 1943, y finalmente ser depositados en el Mausoleo del General Urquiza en la Basílica de Concepción del Uruguay desde el año 1968.
