El telegrama

En avenida Paysandú y Almafuerte, a cualquier hora de cualquier día de la semana, se puede ver que una bocacalle está emanando agua a la superficie del asfalto. Esto genera un lago de media calle más o menos, con agua que tiene mucho olor putrefacto. Debido a esto, ciclistas, motociclistas y conductores de vehículos pequeños, suelen esquivar ese charco permanente de agua, que suele salpicar para todos los costados. Por esquivar el charlo con agua putrefacta, algún ciclista o motoquero va a resultar herido en un accidente. Estamos a tiempo de evitarlo.

Roque Almirón