Campa: “quise exagerar pero, a veces, está cerca de la realidad”

El humorista y figura del stand up Ezequiel Campa, que creó a un rugbier conservador, misógino y xenófobo, analizó los puntos de contacto de su personaje con la realidad.

Junto con la difusión de antiguos tuits en los que el capitán de los Pumas, Pablo Matera, y otros dos integrantes del plantel (Guido Petti y Santiago Socino) realizaban comentarios discriminatorios, Dicky Del Solar, un personaje de ficción creado por el humorista Ezequiel Campa (44), se convirtió en tendencia en las redes. Se trata de un rugbier de la zona norte, muy apegado a sus valores morales y a sus privilegios de clase, que expresa en sus videos -difundidos en su canal de Youtube- ideas similares a las de los integrantes de la selección nacional de rugby.
“Sería muy soberbio de mi parte decir que esto lo vengo diciendo desde hace tres años -contó Campa, el padre de la ‘criatura’ a Télam-. Me parece que hay cosas que son producto de la casualidad y otras que tienen que ver con que ellos me dan tema. El rugby me gana siempre. Con Dicky intenté hacer un subrayado, una exageración, pero noté que, a veces, no está tan alejado de la realidad, sino bastante cerca”, aseguró. “De todos modos, en este contexto creo que los tuits con expresiones discriminatorias son algo menor. Son cosas que suceden en las redes, esas cloacas en las que vale todo. Más grave es la muerte a patadas de Fernando Báez Sosa, en enero en Villa Gesell. Grave es maltratar a las empleadas domésticas, fajar a un pibe en una disco. Grave es hacerle bullying a un chico en un club porque no tiene doble apellido”, enumeró Campa, quien, de inmediato, aclaró que, como humorista, no se siente con derecho a erigirse en faro moral del ambiente del rugby ni de la sociedad. También se ocupó de señalar que ciertas conductas no son solo patrimonio del ambiente del rugby: “Sería hipócrita decir que el éxito de Dicky es porque denuncia a un estereotipo. Creo que a la gente le gusta porque todos tenemos algo de fachos y de miserables, que son conductas inherentes a la condición humana. Todos alguna vez y en alguna circunstancia fuimos un poco xenófobos o detestamos a una minoría”. El humorista especialista en stand up recuerda que el personaje del rugby cristiano y conservador nació a fines de 2017. Había ido a San Isidro a hacer un trámite y encontró las calles empapeladas de carteles y consignas en contra del aborto, un tema que, por entonces, debatía el Senado. “Imaginé un personaje que fuese rugbier ultra-mega-católico y conservador que estuviera en contra del aborto.